Los productos alimenticios comparten un rasgo con los farmacéuticos: su ingesta tiene un efecto directo sobre nuestra salud, aunque en el caso de los primeros suele manifestarse más a largo plazo. Sin embargo, al contrario que los farmacéuticos, no cuentan necesariamente con un profesional intermedio (como puede ser el médico o farmacéutico) que velan por su adecuada administración. Sin este profesional, la información que recibe el consumidor acerca de los productos alimenticios es con frecuencia la emitida por los propios productores. Esta información, que suele adquirir forma de publicidad, tiende a destacar las propiedades favorables de los productos, obviando (y en ocasiones, negando) las nocivas. La caracterización de dichas propiedades suele ser fruto de estudios de investigación realizados por los propios agentes de la industria alimentaria; por este motivo, cuando aparecen informaciones contradictorias, se genera una sensación de desconfianza en el consumidor, que incluso llega a sentirse abrumado. Queda así en una posición en la que le resulta difícil tomar decisiones informadas acerca de su alimentación y, por lo tanto, de su salud. Este efecto se ve reforzado por casos como el que ha salido recientemente a la luz acerca del patrocinio por parte de la industria azucarera de estudios que reforzarían los efectos nocivos de las grasas desviando la atención de los rasgos más negativos del propio azúcar*. En esta Regueifa queremos analizar el papel de la industria alimentaria a la hora de diseñar una dieta sana. ¿Son fiables los resultados de las investigaciones patrocinadas por la industria alimentaria? ¿Deben los alimentos anunciar alegaciones de propiedades saludables en las etiquetas? ¿Es suficiente el control que hay sobre la publicidad de la industria alimentaria? ¿Deben las industrias alimentarias patrocinar a las sociedades médicas?
Para tener una visión completa del tema, participan en el debate dos equipos, uno de ellos formado por Rosaura Léis Trabazo, Pediatra, Profesora de la USC, Coordinadora de la Unidad de Nutrición Pediátrica do CHUS y José Manuel López Nicolás, Profesor de Bioquímica da Universidad de Murcia, Director de la Unidad de Divulgación Científica de la UM, autor del blog Scientia y del libro "Vamos a comprar mentiras".
Del otro lado, forman equipo Enrico Frabetti, Director de Política Alimentaria, Nutrición y Salud de la Federación Española de Industrias de la Alimentación y Bebidas (FIAB) y Rafael Urrialde de Andres, Director de Salud y Nutrición en Coca-Cola Iberia.